<p style="text-align: justify;"><strong>Tulum,Q.Roo.- </strong>Indirectamente el Covid-19 afectó la producción langostera en Punta Allen, el impacto fue colateral en la demanda del consumidor y el acceso al mercado por las medidas de confinamiento, y es que la actividad pesquera sobre el crustáceo se redujo debido a la caída de la demanda internacional, pues desde que comenzó la pandemia ya no hubo exportación a Japón como cada temporada de captura de langosta, precisó Jesús Pereira Cruz, delegado de la comunidad de Punta Allen.</p> <p style="text-align: justify;">Jesús Pereira Cruz, igual informó que este domingo 28 de febrero, inicia la veda de la langosta marina, una de las actividades más importantes no solo en Punta Allen, sino que, en toda la Península de Yucatán, como cada año, la actividad langostera va del 1 de julio al 28 de febrero, pero en esta ocasión las cifras preliminares reportan el incumplimiento de una meta establecida por la pandemia.</p>