<p style="text-align: justify;"><strong>Jose Maria Morelos, Q. Roo.-</strong> Germán Arjona podría ser lo más parecido a un “mil usos”, desde su natal Sabán conduce un taxi de ruta, sus apiarios le permiten ingresos en época de cosecha de miel, pero lo que más le apasiona es cultivar la tierra a la que literalmente le arranca frutos, pues dice, tendría mejores cosechas si contara con un sistema de riego.</p> <p style="text-align: justify;">“Tengo como tres hectáreas de k’ankabales que estoy trabajando, ya tiene como 16 años trabajando en ese lugar, pero lo que pasa, no tengo agua, si tuviera yo agua, me dedico más, que del taxi”, expresó.</p> <p style="text-align: justify;">Como conductor de taxi, ha visto en tiempos recientes una de las peores épocas del oficio, por ello, en los últimos meses se ha refugiado más en la horticultora.</p> <p style="text-align: justify;"><strong>“Ahorita con esta pandemia que está, ya no hay pasaje, no nos resulta, la traxeada, por eso, como yo estoy dedicado para eso, hay donde buscar un poquito de dinero, por la siembra que estoy haciendo”, expresó.</strong></p> <p style="text-align: justify;">A bordo de su viejo vehículo llega a la cabecera municipal para vender sandía, calabaza, pepino y frijol nativo del que le llama X-pelón, frutos que logra a pesar de cultivar al temporal, uno de sus sueños es contar con un sistema de riego para elevar la productividad de su parcela que ha trabajado por cerca de 20 años.</p> <p style="text-align: justify;"> </p>
