José María Morelos, Q. Roo.- Un fenómeno curioso ocurre en José María Morelos, a pesar de las elevadas temperaturas de días recientes, los productos helados no han tenido la misma aceptación. “Concho”, es un joven que se gana la vida vendiendo saborines, con la esperanza de vender todo su producto, todos los días pedalea su triciclo desde La Presumida hasta la cabecera municipal, sin embargo, los últimos han sido de bajas ventas. Ha bajado mucho la venta, no sé si por lo mismo que la gente no sale de sus casas, pues el año pasado me fue bien, vendimos regular y estos tiempos de calor, ahorita está un poco bajo, por lo mismo. Traigo 40 saborines, 20, la mitad es una pérdida total, por lo mismo, por el calor fuerte se echan a perder los saborines, no puedo regresar a Presumida, me lleva una hora.