<p><strong>Noticias Canal 10.- </strong>Expertos de la <strong>UNAM</strong> desarrollaro<strong>n videojuegos </strong>para la<strong> rehabilitación de pacientes</strong> con <strong>daño neurológico</strong> a causa de un derrame o por un infarto cerebral. También trabajan en sensores de posición y movimiento; ya cuentan con un<strong> guante con sensores de datos</strong>, un rodillo electrónico, y una carcasa ergonómica para un mouse convencional.</p><p>En el <strong>Instituto de Fisiología Celular</strong> (IFC) de la máxima casa de estudios surgió el <strong>Laboratorio de Investigación y Desarrollo de Aplicaciones Interactivas para la Neuro-Rehabilitación </strong>(LANR), que desarrolla videojuegos para neurorehabilitación de personas afectadas en su motricidad superior (brazos y manos) por un evento vascular cerebral (EVC), primera causa de discapacidad adquirida en adultos mayores).</p><p>A través del LANR, el IFC busca <strong>ayudar oportunamente a pacientes de EVC</strong> que no tienen acceso a servicios de rehabilitación en el sistema de salud pública. También a aquellos que siendo derechohabientes, pierden la ventana de oportunidad de recuperar las funciones dañadas debido a la demora en la atención.</p><p>Con cinco años de existencia el objetivo del laboratorio es el desarrollo de <strong>aplicaciones interactivas</strong> tipo videojuegos, asociadas a sensores de posición y movimiento -como sería el Kinect de Microsoft-, que apoyen las terapias de rehabilitación en pacientes con algún tipo de discapacidad neurológica.</p><blockquote><strong>“La tarea más apremiante de este laboratorio es que los afectados inicien lo más pronto posible su terapia, y con la mayor frecuencia, por medio de videojuegos que les permitan hacer sus ejercicios en ambientes virtuales y desde su hogar”,</strong> explica a la <em>Gaceta de la UNAM</em>, la<em> </em>maestra Ana María Escalante Gonzalbo, responsable del LANR.</blockquote><p>Asesorado por una<strong> experta en neurorehabilitación</strong>, María Isabel Heredia López, el grupo del LANR tuvo la idea de que los <strong>sensores y los videojuegos </strong>llegaran a los hogares de las personas convalecientes y estas pudieran tenerlos en sus computadoras para realizar sus terapias con la frecuencia indicada y sin la presencia del terapeuta.</p><p>La universitaria afirma que<strong><em> “estos desarrollos se enfocan en apoyar la rehabilitación y no pretenden sustituir la terapia tradicional: son un complemento que proporciona a los pacientes cierta independencia para que no tengan que trasladarse a las clínicas o consultorios a recibir sus terapias”.</em></strong></p><p>El <strong>equipo multidisciplinario del LANR </strong>ha desarrollado <strong>10 aplicaciones tipo videojuegos</strong>, cuatro de las cuales se probaron en 2019, en un proyecto piloto con pacientes del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía de la CDMX, cuyos resultados fueron alentadores, según se describe en la <em>Gaceta de la UNAM</em>.</p><p>El proyecto aportó información para mejorar los videojuegos y los sensores, y permitió identificar a qué pacientes, según el daño neurológico, les serán útiles para recuperar funciones motrices.</p><p>Entre los juegos desarrollados está el ‘Topo-crisis’, en el que el paciente debe pegarle al topo antes de que se esconda, para rehabilitar la fuerza muscular de hombro, codo y muñeca, así como el rango de flexibilidad en el plano horizontal.</p><p><u>Fuente: El Financiero.</u></p>