Noticias Canal 10.- El monte mide aproximadamente 5 kilómetros cuadrados y está totalmente rodeado por las aguas del lago Alsek.

La NASA confirmó el descubrimiento de una nueva isla en Alaska, un acontecimiento que de inmediato remarcó el acelerado ritmo del cambio climático. Mediante imágenes satelitales captadas por su Observatorio de la Tierra, los científicos documentaron el nacimiento de una masa de tierra que fue bautizada como Prow Knob. Este no es un nuevo pedazo de tierra que emergió del océano, sino un monte que, hasta hace poco, estuvo completamente encapsulado por el hielo del glaciar Alsek.

Las imágenes, tomadas por los satélites Landsat, mostraron de manera contundente la drástica transformación del paisaje. Entre julio y agosto de este año, el glaciar Alsek se separó por completo de la formación rocosa que es Prow Knob. Este monte, que mide aproximadamente 5 kilómetros cuadrados, ahora está totalmente rodeado por las aguas del lago Alsek, que también creció significativamente a medida que el glaciar se derritió.

¿Qué pasó con el deshielo de Alaska?

Para conocer un poco más del tema, se reveló que el glaciar denominado como Alsek, que forma parte del campo de hielo de San Elías, retrocedió a un ritmo alarmante durante décadas, y la aparición de esta nueva isla es una de las consecuencias más visibles de este proceso.

Este fenómeno geológico, aunque fascinante para los científicos, es una señal de alarma para el resto del mundo. El nacimiento de Prow Knob no es un evento aislado; es parte de una tendencia más amplia que se observó en todo el sureste de Alaska, donde el hielo fue reemplazado rápidamente por agua.

¿Hay una nueva isla en ALASKA?

El deshielo de los glaciares de Alaska no solo dio lugar a la formación de nuevas islas y lagos, también contribuyó al aumento del nivel del mar en los lugares cercanos a la zona, lo que representó una auténtica amenaza para las comunidades costeras en todo el planeta.

El descubrimiento de esta isla fue el resultado del trabajo incansable de la NASA y otras instituciones de investigación que utilizaron la tecnología satelital para monitorear los efectos del calentamiento global durante los últimos años, lo que no fue del todo alentador.

Los datos que recabaron no solo documentaron estos cambios, sino que también proporcionaron información vital para que los científicos pudieran modelar el futuro del planeta. La historia de Prow Knob, de un monte oculto bajo una capa de hielo a una isla independiente, es una poderosa metáfora de cómo el planeta respondió a las presiones del cambio climático.

El Heraldo.