<p style="text-align: justify;"><strong>Noticias canal 10.- </strong><em> San Fermín. </em>Tres hombres fueron corneados este domingo en el octavo y último encierro de las fiestas de San Fermín en Pamplona, en el norte de España, llevando a ocho el total de heridos por astas de toro en la edición de este año.</p> <p style="text-align: justify;">Entre los que fueron hospitalizados este año tras ser embestidos por los toros se encuentra un estadunidense, herido en el cuello mientras estaba grabando con el teléfono.</p> <p style="text-align: justify;"><strong>En el último encierro del año, dos australianos de 27 y 30 años y un español de 25 fueron corneados por un toro de media tonelada, llamado <em>Rabonero</em>, según informaron las autoridades sanitarias de la región. Sufrieron heridas en una axila, un brazo y una pierna, respectivamente. Otros dos hombres fueron hospitalizados por traumatismos.</strong></p> <p style="text-align: justify;"><em>Rabonero</em>, el toro con más peso de los seis que corrieron este domingo, se descolgó del grupo y efectuó varias embestidas en su recorrido.</p> <p style="text-align: justify;">Los toros rezagados suelen desorientarse y se abalanzan contra la gente con más frecuencia.</p> <p style="text-align: justify;">Este último encierro fue protagonizado por los conocidos toros de la ganadería Miura, de la provincia de Sevilla (sur), que terminaron la carrera de 848,6 metros en 2 minutos y 45 segundos.</p> <p style="text-align: justify;">Las fiestas de San Fermín, del 6 al 14 de julio, son de las más famosas de España y cada año atraen a cientos de miles de turistas de todo el mundo.</p> <p style="text-align: justify;">Durante una semana, cada mañana a las 08 horas (06 horas GMT) centenares de 'mozos' ataviados de camisa y pantalón blancos y con un pañuelo rojo al cuello corren delante de los toros por el centro de Pamplona, después de encomendarse a la imagen de San Fermín.</p> <p style="text-align: justify;"><strong>Al final del primer encierro, un toro embistió e hirió en el cuello a Jaime Alvarez, un estadounidense de 46 años que estaba intentado grabarse en video con su teléfono móvil.</strong></p> <p style="text-align: justify;"><strong>"Fue como si un camión o un coche me golpearan en un lado de la cabeza. Puse mi mano en mi cuello y vi sangre", explicó a una televisión estadounidense desde el hospital de Pamplona, donde fue dado de alta dos días después.</strong></p> <p style="text-align: justify;"> </p> <p style="text-align: justify;"><strong>Fuente: </strong><em>La Jornada</em></p>