En México, la devastación pone en riesgo a los jaguares

Cancún, Q. Roo.- Debido al desarrollo urbano, rural y hotelero que actualmente, está desvastando cientos o miles de hectáreas de vegetación, así como los incendios forestales, cacería furtiva, construcción del Tren Maya, la ganadería extensiva, la transformación de selva y entre otros conceptos, se está poniendo en riesgo la extinción del emblemático jaguar.

Cabe destacar que en estos últimos 10 años, la población del Jaguar en México disminuyó, un censo realizado en 2012 indicaba que había ocho mil felinos de esta especie, pero ahora se estima que es de alrededor de cuatro mil 800 individuos, de acuerdo con datos oficiales de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONAMP), de los cuales entre mil 500 a dos mil están en la Península de Yucatán.

Esta cifra surge de los resultados de estudios de poblaciones del jaguar y sus presas mediante “fototrampeo”, su desplazamiento y el de las presas, en este conteo, participaron 25 grupos de 16 instituciones que colocaron 396 cámaras-trampa en 11 sitios repartidos en 10 estados mexicanos.

Debido a que en el sur de México se llevan muchas obras, una de ellas, el Tren Maya, que consistió en la devastación de cientos o miles de hectáreas, varios felinos han sido atropellados ante la falta de precaución de automovilistas en las carreteras.

En el caso de Quintana Roo, el riesgo es latente en el corredor biológico Yum Balam-Sian Ka´an que cruza la entidad de oriente a poniente y que consiste en un sistema de humedales y selvas que pasan por los municipios de Lázaro Cárdenas, Benito Juárez, Solidaridad, Tulum y Felipe Carrillo Puerto.

El fototrampeo también establece que de manera preocupante ya desapareció 70% del hábitat original de la especie, poniendo además en riesgo la biodiversidad de la zona.

De ahí la importancia de implementar políticas de desarrollo ligadas a la conservación integral de su hábitat que vayan ligadas a alcanzar beneficios en lo social y económico, pero también proteger una especie que pronto puede estar en peligro de extinción.

Fuente: Quintana Roo Hoy