Lun. 31 Mar. 2025

AVISTAMIENTO DE CHINCHE BESUCONA MOVILIZA A VECTORES

Viernes, 28 de Marzo de 2025

Cancún, Quintana Roo.- La enfermedad de Chagas, transmitida por la chinche besucona, es una de las principales preocupaciones para la salud pública en varias regiones de México, incluyendo Quintana Roo. Aunque la enfermedad es silenciosa y puede tardar años en presentar síntomas, su detección temprana es clave para evitar complicaciones graves. Autoridades sanitarias han iniciado campañas de sensibilización y prevención para educar a la comunidad sobre la importancia de la captura adecuada del insecto y la detección temprana del mal.


Cristian González, representante de la Secretaría de Salud y del Área de Vectores, ofreció detalles cruciales sobre la forma en que la población debe actuar ante un avistamiento de la chinche besucona.

Esta medida es esencial, ya que la chinche puede estar infectada con el parásito causante de la enfermedad de Chagas, y el diagnóstico temprano puede salvar vidas.
La enfermedad de Chagas, a menudo conocida como “la enfermedad silenciosa”, puede permanecer latente en el cuerpo durante años. Según González, "los síntomas pueden aparecer entre 5 y 30 años después de la picadura, y muchas veces no se detectan hasta que la enfermedad ha avanzado a una fase más grave". En esta fase, la infección puede afectar órganos vitales como el corazón, el hígado y los intestinos. Debido a su naturaleza asintomática durante largos períodos, la prevención y la educación comunitaria son fundamentales.

Las autoridades sanitarias han instado a los ciudadanos a mantener sus viviendas en condiciones adecuadas para evitar que la chinche encuentre refugio. "Es importante que las casas estén libres de grietas y que se realice una limpieza frecuente, además de fumigar cada cierto mes", añadió González. La participación de la comunidad es esencial para controlar la propagación del insecto, y las autoridades están trabajando para asegurar que las personas sepan cómo actuar en caso de un contacto con la chinche.

Víctor Salazar