Jue. 17 Jul. 2025

RECLAMAN PAGO JUSTO Y FORMALIZACIÓN EN “SALUD CASA POR CASA”

Jueves, 3 de Julio de 2025

Cancún, Quintana Roo. - Personal médico y de enfermería del programa federal Salud Casa por Casa se manifestó este jueves en Benito Juárez para exigir la regularización de pagos pendientes, así como la formalización de sus condiciones laborales. Aseguran que, desde el arranque del programa en febrero, no han recibido pagos puntuales, carecen de contrato, prestaciones y seguridad social, a pesar de realizar jornadas completas visitando a personas adultas mayores y con discapacidad en distintas zonas, algunas de ellas de alto riesgo.

El enfermero Andrés Demetrio Cagal Ortiz explicó que el programa fue promovido como uno de los más ambiciosos por la actual administración federal, pero que en la práctica los trabajadores enfrentan abandono e incertidumbre. Señaló que muchos compañeros llevan meses sin recibir salario, lo cual afecta gravemente a quienes dependen de ese ingreso como única fuente económica, incluyendo madres y padres jefes de familia.
Como medida de presión, el personal anunció un paro total de actividades en el municipio, suspendiendo las visitas domiciliarias hasta que las autoridades atiendan sus demandas. Indicaron que el objetivo no es abandonar a la población vulnerable, sino visibilizar la precariedad en la que operan, sin garantías ni respaldo institucional.
La situación no es exclusiva de Quintana Roo. Según señalaron, en otros estados del país también se han reportado inconformidades similares. En Chetumal, trabajadores del mismo programa realizaron una manifestación frente a Palacio de Gobierno, exigiendo una respuesta de las oficinas centrales de la Secretaría del Bienestar, que hasta el momento no han dado solución concreta.
Los manifestantes recalcaron que no buscan confrontación, sino que se reconozca y valore su labor en campo. Llamaron a la unión del personal de salud y pidieron que el programa retome su enfoque original: brindar atención de calidad a personas vulnerables, sin convertirlo en una estrategia de cifras, sino en un verdadero ejercicio de salud pública con condiciones dignas para quienes lo operan.

Víctor Salazar