<div><strong>José María Morelos, Q. Roo.- </strong>El alcoholismo en menores de edad, no es un fenómeno nuevo, lo que sí llama la atención, es el aumento en el número de personas afectadas y que cada vez, se reduce aún más la edad en la que empiezan a beber, Juventino tenía unos 13 años cuando comenzó a consumir alcohol, eso, hace innegable que, desde hace décadas, niños y jóvenes tienen acceso a este producto.</div><p class="ql-align-justify">Lo realmente grave, asevera el entrevistado, es que, antes, había reserva en los menores, mientras en la actualidad, la mayoría lo hace con el consentimiento pleno de sus progenitores, algunos, incluso, incentivan este vicio en sus hijos.</p><p class="ql-align-justify">Hay un crecimiento enorme, hay la libertad hoy, en nuestros hijos, yo me acuerdo de que yo, empecé a tomar a los 13, 14 años, pero guardado de mis padres, hoy, hay padres que, desde los ocho, diez años, le están dando una copita a su hijo, un vasito de cerveza en las fiestas, muchachitos de diez, doce, trece años, bebiendo igual que sus papás en las fiestas y lo peor, que hoy, ya no solo es alcohol.</p><blockquote class="ql-align-justify">Señaló que, otro sector, este, de padres preocupados por sus hijos, los han llevado a sesiones de Alcohólicos Anónimos, donde manifiestan que tenían temor de que sus hijos fueran “anexados” o reclutados, pero, remarcó, AA, no opera de esa manera y quienes acuden lo o dejan de hacer, no tienen ningún tipo de presión.</blockquote><p class="ql-align-justify"><br></p><p class="ql-align-justify"><br></p><p class="ql-align-justify"><br></p><p class="ql-align-justify"><strong>Juan Ojeda </strong></p><div><br></div><p><br></p>