<p class="ql-align-justify"><strong>José María Morelos, Q. Roo.- </strong>Poco a poco, hermosas tradiciones quedan en el olvido, en el menor de los casos, pierden su esencia, como es el caso de La Rama, actividad en la que raramente se aprecia un grupo bien organizado que entone los cánticos como se hacía en el pasadoAl paso de los años, las tradiciones cambian o desaparecen, tal es el caso de La Rama, cuya esencia se ha diluido o desvirtuado.</p><p class="ql-align-justify">Rubén Sabido, subdirector del Centro Cultural Bicentenario de José María Morelos, recordó que antaño, salir a cantar “La Rama”, significaba esfuerzo y compromiso por parte de los que integraban estos grupos líricos.</p><p class="ql-align-justify">Ha descendido la importancia que se le ha dado precisamente a nuestra cultura a esas tradiciones, yo diría que es una tradición, porque, desde que llegue diciembre, era una de las fechas en las que, pues los niños, incluso personas grandes con panderetas, incluso algunos, hacían algún instrumento…</p><p class="ql-align-justify">Acotó, los infantes que en la actualidad salen a cantar, lo hacen solos o en pareja, y evidencian que su único interés, es la dádiva que reciben.</p><p class="ql-align-justify">Hoy en día, solo podemos ver dos o tres niños y ni la tonada le dan, e incluso en las redes sociales vemos cómo han cambiado ese tipo de interpretación.</p><p class="ql-align-justify">Acotó, existen múltiples motivos para que, algunas tradiciones vayan en declive y, aunque pareciera trillado, las tecnologías de la información y la comunicación han socavado estas prácticas, porque los niños no se interesan mucho en aprender bien los cánticos y prefieren sumergirse en el mundo de los videos y juegos en línea.</p><p><br></p><div><strong>Juan Ojeda.</strong></div><p><br></p>