<p class="ql-align-justify"><strong>José María Morelos, Q. Roo.-</strong> Las nuevas generaciones han dejado de lado el arte de tejer y reparar hamacas, a pesar de que estas son fundamentales en los hogares y forman parte de la cultura local, lamentó Heliodoro Mex Colli, quien ha trabajado en este oficio desde joven.</p><p class="ql-align-justify">En una entrevista, Mex Colli explicó que la producción industrial de hamacas ha afectado negativamente el valor del trabajo artesanal, y pocas personas optan por reparar hamacas, ya que este trabajo requiere mucha paciencia y tiempo.&nbsp;</p><blockquote class="ql-align-justify">“Se ha perdido la esencia de tejer hamacas, de concentrarse en el proceso”, comentó.</blockquote><p class="ql-align-justify">Añadió que, aunque muchos vendedores de hamacas llegan al municipio, carecen del conocimiento sobre su fabricación y la calidad necesaria en la selección de hilos y el tejido.</p><p class="ql-align-justify">Mex Colli expresó su preocupación por el abandono de estas prácticas por parte de las nuevas generaciones, que prefieren la tecnología en lugar de aprender este arte, algo que en el pasado se enseñaba desde pequeños.</p><p class="ql-align-justify">También mencionó que pocas personas se dedican a la reparación de hamacas, un proceso que puede tomar horas e incluso hasta dos días. A menudo, las personas prefieren comprar hamacas nuevas de baja calidad en lugar de pagar un precio justo por una reparación adecuada.</p><p class="ql-align-justify"><strong>Con información de Noticaribe</strong></p>