<p class="ql-align-justify"><strong>José María Morelos, Q. Roo.- </strong>Algunos ejidos de la zona maya tienen vigentes sus permisos de explotación forestal, el rubro se ha reorientado, pues, ya no se adquieren grandes volúmenes del recurso para industrializar, más bien, el negocio ahora se enfoca en material para construcciones rústicas.</p><p class="ql-align-justify">La comercialización de madera con fines de industrialización ya no es rentable, la mayoría de los ejidos con permiso de explotación forestal, se dedican a la venta de “palizada” para la construcción de palapas y el principal mercado se ubica en las áreas turísticas del estado, comentó el ex empresario maderero, Leovigildo Nájera.</p><p class="ql-align-justify">Lógicamente, al llegar a México, ya la madera, el precio está altísimo, esas personas ya no vienen, en la actualidad, pues, se sigue trabajando lo que es la madera, en la palizada, no, para palapas, para pequeños carpinteros, algo así, no, de los que siguen trabajando la madera.</p><p class="ql-align-justify">Mencionó que los ejidos dedicados a la explotación forestal, son también muy respetuosos de los polígonos marcados para la extracción del recurso, los cuales son reforestados para mantener el potencial de cada núcleo.</p><div><br></div><div><br></div><div><strong>Juan Ojeda</strong></div><div><br></div><p><br></p>
